"En
Egipto se llamaban las bibliotecas el tesoro de los remedios del
alma. En efecto, curábase en ellas de la ignorancia, la más
peligrosa de las enfermedades y el origen de todas las demás"
Jacques Benigne Bossuet (1627-1704)
Jacques Benigne Bossuet (1627-1704)
Por: Alexandra Petrovic
Antes
de responder a las preguntas que atañen a este ensayo, es pertinente
hace un intento por definir el objeto de estudio, la Literatura,
término difícil de especificar, el 1RAE
lo define como el “…arte
que emplea como medio de expresión una lengua…. conjunto de las
producciones literarias de una nación, de una época o de un
género…. conjunto de obras que versan sobre un arte o una
ciencia…”, etimológicamente, proviene del latín litterae
que
significa letra, haciendo referencia a todo aquello que ha sido
escrito, aunque no hay que dejar por fuera a la tradición oral que
es precisamente la primera literatura que se conoce, sin embargo, se
considera literatura solo a los textos que cumplen con ciertas
características estilísticas, es la manifestación artística que
hace uso del lenguaje, la literatura es saber, cultura y arte.
Si
se parte desde la premisa de que la literatura es también arte, pues
nace de la subjetividad del artista, enseñar al artista a hacer arte
seria utópico, se puede enseñar las normas y formalidades de la
escritura, pero la pericia para usarlas bajo el efecto de dicha
subjetivad es un acto puramente artístico e individual.
La
literatura ha sido vista desde mucho tiempo atrás como la expresión
de los sentimientos de quien la produce, como la narración de las
historias y mitos de los pueblos, sin embargo la literatura va mucho
más allá de eso, la literatura es muy rica en si misma pues está
empapada del sabor local, de la experiencia histórica, de la época
y de la cultura en la que fue producida, incluso posee los matices y
giros propios de la lengua en la que se compuso o escribió.
¿Por
qué enseñar algo tan complejo y con tantas aristas?, cabe también
la pregunta que algunos ya se han realizado, ¿se debe enseñar
literatura o se debe enseñar a leer literatura?, intentar enseñar
literatura de la manera tradicional y vista únicamente como el
compendio de las historias fantásticas producidas en un lenguaje
cuidado, sería extremadamente extenso e incluso tedioso, el docente
de lengua y literatura debe comenzar a verla como una herramienta y
no solo como como el aburrido y largo programa de lecturas
obligatorias para el año escolar, enseñar literatura con un fin.
Dicho
fin pudiera seccionarse desde varios enfoques, uno sería el enfoque
social/estatal, la educación debería ser descolonizadora y
productiva y desde este punto de vista la literatura es
extremadamente enriquecedora, pues muestra el mundo más allá del
que se conoce, quienes se acercan a ella se encuentran con distintas
realidades, diferentes culturas y tradiciones, a este respecto, la
2LOE
expresa en su Art. 4 que “La educación como derecho humano y deber
social… orientada al desarrollo del potencial creativo de cada ser
humano…, constituye el eje central en la creación, transmisión y
reproducción de las diversas manifestaciones y valores culturales…”,
el maestro debe aprovecharla para construir una identidad nacional y
latinoamericana, promover saberes éticos, sociales e históricos,
leer supone un ejercicio del pensamiento complejo y el conocimiento
de la diversidad engendrando tolerancia y empatía, pues el conocer
la psicología de los personajes, provoca en el lector la visión y
el reconocimiento del otro, así como el sentido de pertenencia de
una cultura y una nación, el 3Art.
3 de la referida ley “…establece
que la educación es pública y social… con pertinencia social,
creativa, artística, innovadora, crítica, pluricultural,
multiétnica, intercultural y plurilingüe.”, ambos artículos
muestran el por qué enseñar literatura desde la visión del estado,
y lo que ha de lograrse, la formación de individuos cultos,
conocedores de sus raíces históricas y tradicionales, que posean
altos valores comprometidos con la sociedad.
En
segundo lugar, pero no por eso menos importante y siguiendo la línea
de enseñar literatura con un fin, no podría dejarse por fuera el
punto de vista académico/profesional, y preguntarse ¿por qué se
enseña?, la respuesta probablemente salte a la vista, cada vez son
más los estudiantes que se reciben en las aulas de bachillerato con
graves dificultades para leer y escribir, chicos que apenas son
capaces de transcribir lo que tienen en la pizarra, jóvenes que no
pueden poner por escrito sus ideas ni adecuan su vocabulario en
función del contexto comunicativo, esta realidad es alarmante y
profundamente preocupante, y si a esto le sumamos que los colegas de
otras especialidades poco se preocupan de esta situación quedaríamos
solos en el intento de hacer algo en pro de la solución. El docente
de lengua y literatura es quizás, el más importante dentro del
sistema educativo, porque no le ha tocado enseñar una disciplina que
quizás mañana se olvide y sea poco útil al futuro intelectual del
estudiante, sino que tiene en sus hombros la responsabilidad de
enseñar, y aun mas, formar para la vida, el individuo necesitará
desarrollar y pulir sus habilidades lingüísticas siempre para hacer
uso de ellas en todos los aspectos habidos y por haber.
Recordando
las interrogantes anteriores, no solo se debe enseñar literatura,
entendiéndose como el acto de dar a conocer los movimientos
literarios, géneros, estructuras, escritores y obras, sino que el
maestro debe además enseñar a leer literatura, promover una lectura
que active la creatividad del estudiante y la libertad de
pensamiento, está comprobado que cuando ejercitamos el cerebro en un
área específica, esta se desarrolla más y mejor gracias a la
plasticidad neuronal, si se quiere lograr un desarrollo apropiado de
las 4competencias
lingüísticas, el saber leer e interpretar las estructuras profundas
de un texto literario es el mejor aliado.
La
enseñanza de la literatura promueve habilidades lingüísticas como
la comprensión y producción de textos, un mejor manejo del código
tanto oral como escrito, despliega la imaginación, mejora la
concentración y amplia el vocabulario, todos beneficios de por vida.
Y
por mencionar una última óptica de por qué y para qué enseñar
literatura estaría el punto de vista personal, como amante de las
bellas letras, debo decir que encuentro en ellas un acervo cultural,
social, humano que valoro, y que quisiera que fuera útil en la
formación de todos los que pasan por las filas de las aulas,
lamentablemente la carga horaria estipulada legalmente para esta
disciplina es en ocasiones muy limitada, no es posible detenerse
mucho en un tema debido a lo extenso del programa, sin embargo, a
pesar de todo esto el maestro de literatura debe en lo posible asumir
que su labor, volviendo al principio, debe ir direccionada con un
fin, enseñar a leer la obra literaria, pero también enseñar a leer
el contexto que la circunscribe e incluso, las posibles aplicaciones
sociales y humanas a las que dé lugar, ¿cómo leer el Quijote, por
ejemplo, fuera de su contexto, o dejar de lado su trascendencia
social y humana?, de eso se trata enseñar con un fin, salir de la
memorización, y entrar en la concientización.
Contagiar
al estudiante con la lectura más que obligarlo a leer, dice Carlos
Lomas que el verbo leer no soporta el imperativo:
“…la
lectura literaria debiera moverse en otra lógica aunque a menudo
dentro de la lógica escolar tenga que haber una cierta coerción
para que lean quienes no quieren leer porque no le otorgan ningún
significado a la lectura… (el maestro entonces utiliza) las
estrategias de la animación lectora y de la escritura creativa abre
a sus alumnos esas ventanas que solo el texto literario abre y que
nos permiten respirar mejor y vivir con la ilusión de una mayor
libertad.”5
Referencias
Chomsky, N. (1957). Estructuras
Sintácticas. Madrid: Siglo XXI.
Obtenido de
http://es.scribd.com/doc/68030764/Chomsky-Estructuras-sintacticas#scribd
Real Academia Española. (2001). Diccionario
de la lengua española (22. ed.).
Obtenido de http://www.rae.es/rae.html
Ley Orgánica de Educación. (2009, 15 de Agosto). Gaceta N° 5929. Caracas Venezuela
Bruzual L., Raquel. La enseñanza de la lengua y la literatura en la
voz de Carlos Lomas. Educere. V12, N°40. Mérida, marzo,
2008.
2
Ley Orgánica de Educación (2009)
3
Op. Cit.
4
Chomsky, (1957)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No Olvides Comentar Aquí: